¿Cocina a gas o de inducción?
Para muchos el eterno dilema, ¿cocina a gas o de inducción?
Ambas opciones son diferentes y por lo tanto, tienen sus seguidores y sus detractores. Os daremos algunos datos sobre unas y otras para que cada cual elija la opción que mejor se adapta a sus gustos y necesidades.
Cocina de gas vs inducción o viceversa
Veamos sus principales características:
- Eficiencia con el medio ambiente. Según el Instituto para la Diversificación y Ahorro de Energía, IDEA, las cocinas de gas natural emiten 200 gramos de CO2 por cada kWh. Por su parte, las cocinas vitrocerámicas producen 450 gramos y las placas de inducción 360 gramos de Co2 por cada kWh.
- Revisión y mantenimiento. Las cocinas de gas requieren de un mayor mantenimiento y de revisiones periódicas. Es importante comprobar la ventilación de la casa y la instalación general del gas para evitar fugas y posibles accidentes.
- Tipos de ollas y de sartenes. Las cocinas de gas permiten cocinas sobre cualquier sartén u olla, sin importar su tamaño ni el tipo de material. Las placas precisan de un menaje especial y de materiales que no dañen o rayen la superficie de la cocina, tales como el barro cocido.
- Espacio necesario. Cocinas con bombona de gas precisa tener un espacio reservado para colocar dicha bombona y de un espacio extra para tener una bombona de repuesto. Cuando se te acabe la bombona tendrás que reemplazarla por otra de forma manual. Por su parte, las cocinas eléctricas no requieren de más espacio extra y se mantiene de forma constante el aporte de combustible sin afectar al cocinado.
- Tiempo de limpieza. Uno de los mayores hándicaps de las cocinas de gas es a la hora de limpiarlas. Requieren de mayor tiempo y esfuerzo y hay que cuidar el perfecto estado y limpieza de quemadores y rejillas.
- Seguridad. Una de las desventajas de las cocinas de gas es el riesgo de fugas que puedan ocasionar accidentes. Actualmente las normas europeas establecen que todos los aparatos de cocción a gas deben estar dotados de sistemas de seguridad de llama. De esta forma, cuando se apaga la llama se corta de forma automática el suministro de gas.
- Ahorro energético. Las cocinas de gas son más económicas y su consumo energético es menor. Facilitarán el ahorro en el consumo de energía eléctrica y cocinaremos en cualquier momento del día sin importarnos los costes de luz.
Como puedes son varios los pros y contras de ambos tipos de cocinas. Dependiendo de tus gustos y preferencias deberás elegir cuál es la más adecuada para tu cocina.